Decir que es casualidad que esta historia surgiera en Chile no es descabellado. Este país se encuentra entre los tres principales consumidores de mayonesa per cápita en el mundo.
Cuando Matías Muchnick era más jóven ya estaba obsesionado con la industria alimentaria. Había tenido algunas experiencias emprendedoras en este sector y, aunque en un principio optó por una carrera en la banca, su deseo de construir algo más grande y emocionante lo llevó a protagonizar una de las historias de emprendimiento más inspiradoras de la actualidad.
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